Puras y duras razones económicas, agravadas por la condición de insularidad de BC Gran Canariaimposibilitar lo que habría sido la segunda participación de los claretianos en la euroliga. Precisamente la mala experiencia vivida por el club hace cinco años en la que el equipo estuvo cerca del descenso y se quedó fuera de Europa la temporada siguiente, pesó mucho en la balanza de una decisión que el propio club sitapha sabana reconocido como «el más difícil» desde su llegada como presidente del Granca.
Le pesaba más la cabeza que el corazón en una decisión aprobada «por unanimidad» por la junta directiva, aferrándose a la necesidad de aumentar entre 4 y 5 millones el presupuesto del Granca, una cifra que el tiempo ha demostrado que es inalcanzable para los giallorossi en la momento que tendrá que conformarse con jugar la Eurocopa el año que viene, por el compromiso del club de no renunciar a la posibilidad de jugar la Euroliga en el futuro, siempre que no sea una «irresponsabilidad disfrazada de valentía».como subrayó el propio Savané en su intervención ante los numerosos medios de comunicación que poblaron la sala de prensa del Arena, en un ambiente fúnebre, el de las ilusiones de la marea amarilla de poder ver a su equipo codo con codo con los mejores equipos de Europa.
Del minucioso análisis realizado por la directiva del Granca en los últimos meses, dado que veíamos la posibilidad real de afrontar el escenario que finalmente se materializó con la conquista de la Eurocopa, los números no se correspondían con las ganas de poder jugar una competición que requería un enorme aumento de gastos, pasando de «jugar 18 partidos a 34, más el desgaste de pasar de 3 días de descanso entre partidos a solo dos, más a las 7 semanas de doble turno en la Euroliga que les obligaba a viajar en vuelos chárter», dijo Savané, que reconoció haber tomado como referencia el Valencia Basket para actualizar unos números que dispararon el presupuesto de fuera de casa para la próxima temporada hasta los «2.025.000 euros». , además de tener que reforzar su plantilla situándola al nivel del Alba Berlín con el fichaje de «al menos cuatro jugadores con nivel de Euroliga, lo que supondría aumentar el presupuesto de la plantilla un 50%, unos 7,5 millones de euros».
El requisito de CBA
La posibilidad de jugar con una plantilla reducida es vista por la dirigencia claretiana como un suicidio podría hacer peligrar la permanencia del equipo en la ACB o su plaza europea para el próximo curso, ya que como ha recordado Savané: «La participación en la Euroliga no garantiza la participación del club en la Eurocopa del año siguiente, sino que tenemos que clasificarnos vía ACB y para eso tiene que clasificarse entre los ocho primeros».
Los beneficios económicos de participar en la Euroliga no son equiparables a los del fútbol y en especial el ascenso de la UD Las Palmas a la máxima categoría. En el caso de Granca, recibiría «un pago a tanto alzado de 500.000 euros, de los que se descuentan unos 150.000 euros en concepto de honorarios arbitrales». Esos 350.000 euros a los que se refiere el presidente claretiano son a priori los únicos ingresos que recibiría el club en caso de disputa en la máxima competición continental, dado que para entrar en el reparto de la denominada Piscina Deportiva, que arranca en 1.759.398 euros del primer clasificado a 175.940 euros del 14º, hay que situarse entre los 14 mejores, porque los cuatro últimos clasificados «no reciben ni un euro», es, por ejemplo, lo que le ha pasado al Alba Berlín esta temporada.
En este sentido, Savané explicó el modelo de Euroliga como ideal para grandes núcleos de población con capacidad de generar sus propios recursos a través de boletería propia, abonos y patrocinios., lo que les hace preferir ciudades como Londres o París de cara al futuro, que tienen esa capacidad o potencial. En este sentido, la falta de apoyo del empresariado canario a la hora de rodar esta temporada que empieza a volver a la situación económica anterior al covid, no ha ayudado al menos para esta temporada, imposibilitando cubrir una situación tan acusada. incremento en el presupuesto. Tampoco era una solución para el Cabildo de Gran Canaria, como propietario, asumir un gasto tan importante a costa de las arcas públicas.
Sobre la decisión de seguir compitiendo en la Eurocopa, renunciando a opciones de competir en Baloncesto Liga de Campeones, se deben a que el club, según Savané, «no renunciará a poder volver a la Euroliga en un futuro, con un mínimo de garantías, pero se necesitan bases sólidas». Además, la ventaja económica no es tan alta como podría parecer, teniendo en cuenta que sólo el campeón es el que gana «un millón de euros», además de que la próxima temporada probablemente se unificarán la Eurocopa y la BCL, para hacer más poderosa y mejor competencia”.
Una plantilla con un contrato del 70-80%
«Tener fortuna que el 70-80% de la plantilla tiene contrato y eso nos da tranquilidad», dijo Willy Villar sobre preparar la plantilla para la próxima temporada, independientemente de que el equipo haya decidido no jugar en la Euroliga. Como el presidente amarillo, el sporting El director destacó que tanto los jugadores como el cuerpo técnico fueron los primeros en respaldar la decisión del organismo, a pesar de que muchos jugadores tienen cláusulas de salida y no se sabe qué puede traer el mercado de fichajes antes de que cierre la ventana de fichajes.
El técnico grancanario reconoció que si pudiera jugar en la Euroliga, podría «acometir fichajes de cierta enjundia para completar la plantilla en cuanto a experiencia o nivel».
La comunicación con el equipo siempre ha sido directa, recordó Savané: «queríamos ser honestos y transparentes con ellos en todo momento», y la respuesta de los jugadores fue que «su compromiso es con el Gran Canaria y no con la competición a la que nos enfrentamos». conversar».
El presidente dejó abierta la posibilidad de perder jugadores importantes por la ley del mercado, pero recordó que es algo que «ya pasó en el pasado, pero la afición siempre ha mostrado fidelidad a su club y la verdad es que la decepción en este caso está compartido».
El club acometerá un aumento de abonos que se dará a conocer en breve durante la presentación de la campaña, aunque será paulatino para seguir creciendo, aunque lejos del 70% que hubiera sido necesario en el caso de jugar en la Euroliga.
Por parte de la organización de la máxima competición europea de clubes, el entendimiento de la situación económica del club era total y como recordaba el propio Savané, la propia Euroliga ya había comunicado que el Valencia sería el equipo que ocuparía el puesto del Granca en caso de no puedo jugarlo En cuanto a Dreamland, la decisión del club «no afecta al acuerdo de patrocinio alcanzado para los próximos seis años».