Imagen de la serie ‘La mirada biasgada’, de Mariví Gallardo, que ahora exhibe ‘¿Aceptar todo y cerrar?’, en la Fundación Francis Naranjo. /
La artista visual grancanaria expone ‘¿Aceptar todo y cerrar?’, mientras que la chilena hace lo propio con ‘Otros mundos, otros sonidos’
los
Fundación Francesco NaranjoSituada en el número 63 de la Avenida Primero de Mayo de la capital grancanaria, acogerá una doble exposición protagonizada por el
la artista visual Mariví Gallardo de Gran Canaria y la chilena Vogel.
‘Otros mundos, otros sonidos’, del artista sudamericano se exhibirá en la Sala Rasante y Superior de esta Fundación, mientras que el creador de la isla exhibirá
‘¿Aceptar todo y cerrar?’ en la habitación del sótano, gracias al convenio existente entre esta entidad y el Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria.
Desigualdad de género y discriminaciónla división sexual del trabajo, los espacios, los roles, las conductas, la dominación, la subordinación, los sistemas de creencias y los mecanismos de reproducción social son «palabras clave», según la Fundación Francis Naranjo, en el
propuesta que presenta Mariví Gallardo de este viernes.
La observación de los espacios cotidianos es una de las claves en las que esta artista basa su propuesta, que subraya que «
A pesar de los avances en las políticas de igualdad y conquista de derechos para las mujeres, la valoración social desigual de lo masculino y lo femenino y sus sistemas de símbolos no han cambiado y emergen en la vida cotidiana como revelación de una latencia enquistada”, explica la Fundación.
De ahí que sus obras ahonden en la mirada sesgada y los hábitos creados por una tradición de roles y estereotipos patriarcales; en los elementos simbólicos vinculados a una serie de reglas referidas a la feminidad y al control del cuerpo femenino; él
a la comunicación oficial de conocimiento especialmente en la transmisión de información y estereotipos de la sociedad occidental, blanca y androcena.
El título de la exposición alude al «mantra de nuestra actual realidad acelerada, tecnológica y virtual que extrapola el proyecto como alegoría de la aceptación y consecuente legitimación social de mandatos que reproducen una economía simbólica de
poder hegemónico socioeconómico-cultural y que en su conjunto responde a una estructura de poder subyacente inherente a las relaciones de género».
primavera 2019
‘Otros mundos, otros sonidos’, de Vogel (Santiago de Chile, 1971) forma parte de una encuesta en la que
«desde lo visual, poético y político» busca «limpiar la llanura de un horizonte silencioso y camuflado», dice la Fundación Francis Naranjo.
“Sus obras nos hacen mirar de cerca algunas de las rupturas que desde la distancia aparecen suaves y silenciosas, a representaciones que abordan los choques entre las imposiciones coloniales y las subjetividades americanas”, agrega. En concreto, en la capital grancanaria es protagonista de una exposición que «está configurada por una instalación de tejidos náuticos italianos donde cada uno de ellos tiene una detallada imagen impresa, imagen que ha captado el impacto expandido del trazo sobre vidrio templado de
edificios corporativos en santiago de chileque son vestigios de la furia provocada en el
Primavera Chilena 2019».
Las telas translúcidas crean un «ambiente inmersivo que permite el compromiso sensorial con las capas de ruido producidas por la imagen». La obra, denominada
‘el sonido de lo mismo’ «Sugiere recuperar la memoria sensible ante la experiencia de escuchar los chirridos de esos fracasos». Así, «el recuerdo, la furia, el sonido de cristales rotos» se recrean para envolver al visitante «con la repetición de estas imágenes y sus detalles oa través de esos agujeros para los ojos».
‘El eco de las lenguas‘ también forma parte de su propuesta y consta de un conjunto de objetos y videos. «Los objetos son restos del monumento ‘Mártires de Carabineros’ donde se concentró en la capital la batalla del estallido chileno» y que el artista trasladó a su taller y en cuya superficie grabó «los nombres de las lenguas de los indígenas transfronterizos de América”, que puede entenderse como “un reflejo de la visible usurpación de la oligarquía criolla y de las fronteras impuestas por el Estado que el Octubre chileno develó con fuerza.