- Participa escritor cubano en curso ‘La construcción de la nueva utopía del siglo XXI
- “Hay muchas razones para trabajar por una utopía ante la creciente pobreza y concentración de la riqueza de hoy”, defiende Ana María Torres Mejías
- En las sesiones de este curso también participa el escritor José Manuel Fajardo, Premio Espartaco a la mejor novela histórica 2022
San Bartolomé de Tirajana, 20 de julio de 2023
“Estamos viviendo la utopía que fue un sueño hace 50 años y quizás, en el futuro, ellos vivan el nuestro”, porque “la sociedad está cambiando y lo que es utópico en un momento puede no serlo en otro”, expresó la escritora cubana Karla Suárez en el curso ‘La construcción de la nueva utopía del siglo XXI’, de la XXXI edición de la Universidad de Verano de Maspalomas, que el escritor Carlos Taibo cerrará el viernes.
En este curso, coordinado por Germán Santana, los ponentes participan con el objetivo de proponer ideas, pensar y reflexionar sobre los sistemas sociales ideales y cómo podemos transformar las condiciones materiales de nuestro presente, para lograr ese sistema perfecto. El programa responde a una necesidad: “pensar las nuevas utopías, las de nuestra sociedad, en la que ya vivimos situaciones ideales para las generaciones anteriores, como podemos ver con la revolución feminista en nuestra sociedad actual”.
Karla Suárez y el escritor José Manuel Fajardo, ganador del Premio Espartaco a la mejor novela histórica 2022, participan en dos de las sesiones del curso con su enfoque, desde la literatura, en el que destacan el aumento de las distracciones en el fenómeno literario. “Es lo opuesto a la utopía y podría verse, precisamente, como la salida de ese régimen del que se quiere escapar”.
En el programa formativo, los ponentes participantes presentan a los alumnos diversas obras literarias sobre utopías o en las que se han sentado bases reales que se han llevado al extremo de la ficción literaria. “Eso es lo que pasó con 1984 de George Orwell, donde la distopía presenta un mundo en el que hay una base real fácilmente identificable”, dice el escritor cubano.
“La utopía parte de una fantasía”, dice Karla Suárez. “Y hay que tener mucha imaginación para definirlo, ya que es un mundo imaginario al que aspiras. Pero a nivel literario hay que distinguir la parte narrativa, que va mucho más allá aplicando la creatividad y que nos permite imaginar, llegando incluso al extremo”.
Ana María Torres Mejías
En este curso también interviene Ana María Torres Mejías, relanzando la necesidad de la utopía a partir del presente: «en la sociedad en la que vivimos hay razones para pensar en trabajar por una utopía que luche, por ejemplo, contra la pobreza y la concentración de la riqueza que vemos todos los días».
Siguiendo el razonamiento, “debemos superar el concepto idealizado que heredamos de la utopía de Tomás Moro y, sobre todo, la aplicación sangrienta de sistemas considerados utópicos en épocas anteriores, por lo que ahora nos preguntamos: ¿cómo podemos plantearnos la sociedad ideal del futuro?”. Para muchos pensadores actuales, la utopía implica rebelión, pero no desde la violencia sino desde un punto de vista teórico marxista y, sobre todo, “destacando las pequeñas utopías que surgen a nuestro alrededor”, dice Torres Mejías.
Citó como ejemplo lo sucedido en Tenerife al paralizar algunas construcciones. Son pequeños pasos “que surgen de manera popular, desde una forma de entender la economía y el mundo. Estas microprotestas exponen la necesidad de formas alternativas de gestión».
Son precisamente estas pequeñas revoluciones sociales las que el politólogo Toni Negri ve como formas diferentes de entender la realidad “y es precisamente por eso que debemos entenderlas y no dejarlas solas. Yendo más allá, Torres Mejías considera “cuál es el precio que tenemos que pagar por ser utópicos y pensar modelos alternativos sin que ello constituya un sacrificio. Porque un individuo enajenado no es feliz”.
La 31 Universidad de Verano de Maspalomas está organizada por el Ayuntamiento de San Bartolomé de Tirajana, el Cabildo de Gran Canaria, la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria y cuenta con el patrocinio del Instituto Canario para el Desarrollo Cultural del Gobierno de Canarias, Fundación MAPFRE Canarias, Fundación La Caixa, Fundación DISA, GLOBAL y CANALUZ. Además de la colaboración del Consejo Social de la ULPGC, Academia de las Artes Escénicas de España, Fundación Parque Científico Tecnológico, Rotary International, Hoteles RIU, Grupo Lopesan, Gloria Thalasso&
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