Uno de los equipos punteros este año en Tercera RFEF es un equipo histórico como el Estrella CF y su director técnico Antonio Jerónimo Santana Ramos, más conocido como Jero Santana (Las Palmas de Gran Canaria, 1976). Jero consiguió la temporada pasada volver al Grupo XII de la Tercera RFEF tras cinco años de sequía. En su larga trayectoria ha dirigido a clubes históricos como el CD Arguineguín, la UD Telde, el Unión Viera CF y la UD Lanzarote.

-El Estrella lleva cuatro años en la Preferente, tras el último descenso de Tercera División, y en dos años ha sabido cambiar la dinámica, un equipo reformado, un club muy serio. ¿Cómo se siente ser uno de los verdaderos artífices del triunfo de este grupo?

-Estoy muy satisfecho con el objetivo conseguido, pero no era solo cosa mía, fui yo quien lideró el proyecto junto con Dailos, el director deportivo. Los jugadores estuvieron a la altura, sobre todo el segundo año, ya que el primer año estuvo marcado por la pandemia y no pudimos terminar el campeonato. El segundo año fue el proyecto de nuestro presidente Óscar tristemente fallecido. Él lo tenía en mente y nosotros nos encargamos de hacerlo realidad. Mis jugadores son realmente los protagonistas. No es un cliché, es la realidad.

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Desde que sacaste a Toni Dumpiérrez del banquillo, el Estrella CF ha cambiado de imagen y te mereces mucho crédito. Ha creado un grupo que combina la experiencia de muchos y la juventud de otros.

-Sí, antes de mi llegada las cosas iban bien en el Estrella. Muchas veces, por increíble que sea tu trabajo, los objetivos no siempre se materializan. Porque si el deporte no acompaña…, pero no quiere decir que lo tengas todo mal. Cuando me hice cargo del equipo, Tony me aconsejó, ya que dejó el fútbol por una enfermedad temporal. De hecho, fue uno de mis mentores en el fútbol, ​​aprendí mucho de él. La primera temporada sirvió como reconocimiento para la siguiente temporada para crear un diseño ganador donde se hizo una apuesta firme por el ascenso y finalmente se cumplió.

-¿Resultado dedicado al presidente?

-Teníamos una temporada por enmarcar, se hizo de manera brillante, y se la dedicamos al alma mater del club, que en paz descanse nuestro presidente. Tenía un don especial para tocar las llaves de las personas para animarlas y darles palmaditas en la espalda para animarlas. Cuando las cosas no salieron según lo planeado, él fue el primero en apoyarte.

-Tras el salto de categoría, ¿cuál es el verdadero objetivo del club esta temporada?

-Hay que ser realista, hay muchos equipos que se consagran en la categoría, que no suben ni bajan. Equipos históricos como Lanzarote o Villa. Es más fácil para ellos quedarse. Te engañaría si te dijera que nuestro objetivo es acabar entre los cinco primeros y jugar la liga de ascenso a 2ª RFEF. El objetivo es la salvación, la consolidación del equipo en la categoría y de ahí hablaremos. Solo se salvan tres. Es un objetivo muy complicado pero es la prioridad, y luego el campeonato te marcará los pasos.

– ¿Qué diferencia encuentras entre entrenar en Tercera RFEF y Regional Preferente?

-Hay un gran salto entre Preferente y Tercera, pero aún mayor de Tercera a Segunda RFEF. El año pasado se demostró que el fútbol canario está a la altura del resto. Es un déficit lo que tenemos aquí. Esa caída de cinco de cinco es que algo anda mal, algo anda mal. Nunca he visto descender a cinco equipos extremeños, ni a cinco de la propia Comunidad Autónoma. Entonces tenemos que planificar una reforma. Si es cierto que es lo que hizo mucho más fuerte al Tercero, y siendo tan bajo se hace más poderoso. Al comienzo del campeonato estamos viendo muchos empates y victorias como mínimo.

-¿Cuáles son tus cualidades como entrenador?

-Siempre me han gustado los equipos que tienen un ritmo y una intensidad muy altos. Que juego en el lado contrario, que mi equipo tiene la posesión del balón y sabe dónde jugarlo. No miro la tasa de dominio. Solo quiero que cuando tengamos el balón sepamos cuándo darle velocidad y cuándo parar, y que la energía de mis jugadores en los entrenamientos se refleje en el partido del fin de semana. Cuando salgo de los entrenamientos me voy súper contento a casa porque mis jugadores dan el 100%. Estamos en el punto álgido del final de nuestra particular pretemporada. Ahora mismo somos la estrella que quiero, estamos bien físicamente y somos un equipo muy correcto desde todos los puntos de vista.

-El truco de Ale López como preparador físico.

-Encaja perfectamente con lo que pido a los jugadores. Es ideal para este puesto en el club. Fui su entrenador en Unión Viera y desde pequeño tuvo dotes de liderazgo que ahora transmite a los chicos. Siempre te da una ventaja en el entrenamiento.

-¿Se siente querido y apreciado por los sardos?

-Sí, pero los resultados ayudan mucho. Cuando te dan un ascenso después de cuatro años y tantos proyectos que no han salido, es común que la gente te respete y aprecie. La Estrella tiene 77 años de historia, siempre ha sido un equipo a batir en la categoría. Jugar en Las Palmitas no es tarea fácil, cuando jugaba en el Vecindario viví el derbi y fue increíble porque aquí la gente del país no es de la UD ni del Barça ni del Madrid, sino del Estrella. Sardina es muy especial para mí y me siento muy querido por su gente.

-Si tuvieras que definir a tu equipo en tres palabras, ¿cómo lo harías?

-¿Si tuviera que definir la Estrella? Para mí está claro que somos un equipo trabajador, competitivo y muy equilibrado.