La visita se ha realizado en el marco de un proyecto Interreg MAC (financiado con fondos FEDER) en el que participan, entre otras instituciones, el Servicio Canario de Salud y la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria.
El Complejo Hospitalario Universitario Insular-Materno-Infantil, centro anexo a la Consejería de Sanidad del Gobierno de Canarias, recibió la visita de un grupo de sanitarios de Mauritania, Senegal y Cabo Verde.
Durante el encuentro visitaron las unidades de Pediatría, Neonatología, Obstetricia y Ginecología, así como los laboratorios de simulación hospitalaria.
Los participantes en la visita conocieron los hospitales y mantuvieron reuniones con el personal de las distintas unidades con el objetivo de activar métodos de colaboración, principalmente en el ámbito formativo.
A través de este proyecto se han creado talleres para mejorar la salud materno-infantil en estos países africanos.
En particular, visitaron las instalaciones de la Sala de Simulación Avanzada y conocieron el sistema de trabajo que se utiliza durante los simulacros clínicos que se realizan en esta Sala, como parte de la formación continua del personal del Complejo Hospitalario en la atención de pacientes pediátricos graves. y neonatal.
A través de estas simulaciones clínicas, el tratamiento se lleva a cabo en condiciones casi reales de casos clínicos de tratamiento de pacientes graves, con objetivos didácticos que se han definido en la fase de diseño del caso.
Además de las habilidades clínicas, también se evaluó la importancia del trabajo en equipo, la detección temprana de complicaciones y errores y la comunicación de malas noticias.
Una vez realizado el caso, se realiza un análisis reflexivo conjunto, en un ambiente de seguridad psicológica, para destacar todas aquellas acciones que se han corregido, e identificar los puntos de mejora, con propuestas concretas a implementar.
Existe mucha evidencia que avala la utilidad del uso de la simulación clínica, integrada en la práctica asistencial diaria, como elemento que aumenta la seguridad del paciente, reduce el riesgo de eventos adversos y mejora el trabajo en equipo y la eficiencia del sistema sanitario.