Imagen de archivo de un contenedor quemado en el barrio de Tamaraceite. /
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En el último año se perdieron 162 depósitos de basura y 39 papeleras, con un coste económico de 96.653 euros
La vuelta a la normalidad tuvo su peor cara en 2022 con los ataques a las papeleras. La ciudad ha perdido un total de
162 depósitos y otros 39 bins. Para encontrar este nivel de vandalismo, hay que remontarse a 2013, cuando se fundieron 120 unidades. Con estos datos, 2022 se caracterizó por ser el año con mayor número de contenedores quemados en las calles de Las Palmas de Gran Canaria en la última década.
El aumento de los ataques es considerable en comparación con el año pasado, cuando se quemaron 85 unidades. Esto representa un aumento interanual del 91 %, lo que significa que se incendió casi el doble de contenedores de transporte en 2022. En la sección
canastas, hubo una bajada (-17%) en cuanto a número de ataques respecto a 2021, cuando las víctimas llegaron a 47.
EN DETALLE
+53%
La pérdida de capacidad de recogida de residuos tras el incendio de 2022 fue de 306.000 litros. Esto supone un incremento del 53% sobre lo calcinado en 2021, que fueron 200.300 litros, según datos que maneja el Ayuntamiento.
Los 162 contenedores carbonizados muestran un nivel de vandalismo sin precedentes. En años anteriores, el número de accidentes fue muy inferior: de los 85 notificados en 2021, hay que recordar los 74 casos de 2020; el 77 de 2019; 51 del año anterior; o la 105 de 2017, por citar solo los últimos seis años.
En julio, el número de depósitos calcinados ya había llegado a 101, es decir, casi tantos como en todo 2017. Para encontrar un nivel de daño similar, debemos remontarnos al período comprendido entre
entre enero de 2012 y octubre de 2013, con 196 unidades quemadas; o entre marzo de 2008 y los primeros días de 2009, con un total de 184.
Perdidas economicas
El coste económico de estos ataques no es despreciable. La ciudad perdió un total de 96.653 €. De esta cantidad, 94.118 euros corresponden a papeleras, mientras que el resto (2.535 euros) se debe a papeleras.
El Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria explica que las papeleras se llenan al 100% en poco tiempo, mientras que en el caso de diferentes tipos de contenedores se tarda más ya que la disponibilidad no es la misma.
Por ello, y por el riesgo que supone para los ciudadanos, vehículos y viviendas cercanas la quema de estos depósitos, el grupo de Gobierno anima a los vecinos a presenciar el incendio de un contenedor
denunciarlo a la Policía Estatal (091) o a la Policía Local (092).
Por tipos
Según datos facilitados por el Servicio Municipal de Limpieza,
la gran mayoría de los contenedores atacados son residenciales (63%). Había 102 en total, de los cuales 82 eran de 1.000 litros, mientras que otros veinte eran de 2.400 litros.
En este caso, el perjuicio económico asciende a 15.355 euros por los envases de mil litros. A ello se suman los daños a los que tenían una capacidad de 2.400 litros y que provocaron unas pérdidas de 16.317 euros.
En cuanto a
depósitos verdesSe perdieron veintiuno de los 2.700 litros de capacidad, con un coste de 11.844 euros.
Había tres tipos de contenedores destinados a
contenedores que fueron impactados: cinco de los 2.500 litros se perdieron; uno de 3.000 litros; y doce de 3.200 litros. En términos económicos, las pérdidas fueron respectivamente de 3.542 euros, 1.031 euros y 20.321 euros.
En cuanto a los tanques azules, los que recogen el
papel, los daños alcanzaron dos tipos distintos: los de 3.000 litros (9 quemados) y los de 3.200 litros (12 quemados). En el primer caso, los daños ascienden a 9.283 euros; y 16.371 euros, en el segundo.
Finalmente, en el apartado cesta, los 39 quemados se reparten de la siguiente manera: 17 burdeos, por valor de 1.105 euros; y otros 22 grises, con un coste de 1.430 euros, según datos que gestiona el servicio municipal de limpieza del municipio capitalino.